Tal vez hayas recibido un retenedor del ortodoncista y lo hayas usado fielmente durante un mes o dos antes de dejarlo olvidado en el armario del baño por un tiempo. Ahí es cuando empezarás a notar una serie de cambios en tu boca. Tal vez te preocupe perder todo el trabajo que habían hecho los brackets. ¿Los retenedores pueden realinear los dientes? Depende de cada caso, pero entender cómo actúan los retenedores puede darte una respuesta más clara.
Retenedores, ¿para qué?
Justo cuando pensabas que tu camino hasta conseguir una dentadura rectilínea había terminado, tu ortodoncista te quita los brackets solo para entregarte un nuevo aparato bucal. Los retenedores son elementos personalizados que estabilizan la posición de los dientes. Según los estudios especializados, los aparatos de ortodoncia llevan a cabo desplazamientos significativos que pueden producir cambios en la estructura ósea de la boca.
Los retenedores ayudan a estabilizar los dientes a medida que crece el nuevo tejido óseo a su alrededor, lo que solidifica su posición y, en definitiva, contribuye a mantener los dientes rectos y rentabilizar tu inversión en ortodoncia. El ortodoncista te indicará durante cuánto tiempo tenés que usar un retenedor, y si tenés que hacerlo durante el día, solo por la noche o en ambos casos.
Desgaste y cuidado del retenedor
Una vez que el ortodoncista te entrega un retenedor, sos vos quien tiene que usarlo y cuidarlo correctamente. Cuidar el retenedor y seguir las indicaciones de uso es imprescindible para asegurarte de que cumpla su función de mantener los dientes en su posición. Tendrás que usarlo de acuerdo con las instrucciones de tu ortodoncista, mantenerlo limpio y retirarlo al comer.
Por supuesto, podés olvidarte de llevar el retenedor por un tiempo. También podés perderlo o romperlo. En esas circunstancias, tendrás que programar una cita con tu ortodoncista para hacer un nuevo retenedor o estudiar un nuevo tratamiento.
¿Los retenedores pueden realinear los dientes?
Es importante recordar que los retenedores tienen como objetivo ayudar a los dientes a mantener su posición después de una fase de ortodoncia activa (por ejemplo, brackets). No ejercen la misma fuerza para desplazar los dientes que los alineadores o brackets. Aun así, si han pasado pocos días desde que te acordaste por última vez del retenedor, no tenés por qué preocuparte: simplemente volvé a ponértelo lo antes posible.
Si has estado semanas o meses sin usar el retenedor, probalo para ver si todavía te queda bien. Si te resulta incómodo o lo sentís demasiado pequeño, los dientes se han desplazado y tendrás que hablar con tu ortodoncista. Es posible que el retenedor pueda guiar suavemente los dientes otra vez hacia atrás si el tejido óseo aún no ha crecido y solidificado la nueva posición de los dientes. Si has estado sin retenedor durante tanto tiempo que se ha producido un nuevo crecimiento de tejido óseo, tu ortodoncista podría proponerte usar brackets, alineadores transparentes u otros métodos para ayudarte a realinear los dientes.
Recordá que un retenedor es solo eso: una forma de retener todo el trabajo realizado para enderezar los dientes. Usalo siguiendo las instrucciones de tu ortodoncista para aprovechar tu tiempo y tu inversión. Aun así, si te olvidas del retenedor y lo sentís apretado o flojo al volver a colocarlo, consultá con tu ortodoncista el próximo plan de acción. Intentar enderezar los propios dientes puede causar dolor o empeorar las cosas, por lo que es conveniente acudir a un profesional para mejorar la sonrisa.
