El mal aliento puede ser un problema vergonzoso para algunas personas e incluso llevar a situaciones sociales incómodas. Conocer las causas del mal aliento es importante, ya que este problema podría ser una señal de una afección dental o médica más grave. Por fortuna, existen varias medidas que puede tomar para tratar el mal aliento y lograr que tu boca esté limpia y saludable.
¿Cuáles son las causas del mal aliento?
El mal aliento, también conocido como halitosis, es un olor desagradable que suele detectarse cuando una persona exhala. Existen varias causas, la mayoría de las cuales comienzan en la boca. La Asociación Dental Americana (ADA) señala que las causas más comunes del mal aliento son las siguientes:
- Algunos alimentos: Los restos de alimentos que quedan en la boca después de comer pueden causar mal olor debido al aumento en la cantidad de bacterias. Los alimentos penetrantes, como el ajo, la cebolla y algunas especias afectan el aliento a medida que son digeridos y transportados por el cuerpo.
- El tabaco: Fumar cigarrillos y puros, así como consumir otros productos de tabaco puede causar un mal olor muy característico. Además, el consumo de productos de tabaco aumenta el riesgo de padecer cáncer oral y de otros tipos.
- Mala higiene oral y la enfermedad de las encías: El no cepillarse los dientes, no usar hilo dental y no limpiarse la lengua hace que las partículas de los alimentos se queden en la boca. La descomposición de estas partículas por parte de las bacterias puede ocasionar mal olor. Además, estas acumulaciones de bacterias aumentan el riesgo de padecer la enfermedad de las encías. Si usa algún dispositivo dental, como lo son los retenedores y las dentaduras, límpielos con regularidad. No olvide cambiar su cepillo dental cada tres meses o según las recomendaciones de su dentista.
- Sequedad bucal: La saliva ayuda a limpiar la boca, ya que enjuaga las partículas de comida. Cuando la saliva que se produce no es suficiente, estas partículas que pueden causar mal aliento quedan en la boca. Existen varios medicamentos cuyos efectos secundarios incluyen sequedad bucal y que por ello pueden causar mal aliento de manera indirecta.
- Condiciones médicas: Las infecciones respiratorias y la inflamación de los senos nasales, los pulmones y la garganta pueden provocar mal aliento, sobre todo si hay flujo de moco en la zona de la boca y la nariz. Otras condiciones médicas que pueden causar mal aliento incluyen la diabetes, algunas enfermedades del hígado y la enfermedad de los riñones.
Cómo combatir el mal aliento
Quizá el remedio casero más importante sea cepillarse los dientes, usar hilo dental y limpiarse la lengua con regularidad. Cepillarse los dientes dos veces al día y usar hilo dental y limpiarse la lengua al menos una vez al día ayuda a eliminar las partículas de alimentos de la boca. Limpiarse la lengua después de cepillarse los dientes reduce la cantidad de bacterias que se encuentran en la parte posterior de la misma. Existen cepillos dentales con limpiadores de lengua cuya acción para eliminar el mal aliento ha sido clínicamente comprobada.
Su dentista le podrá recetar o recomendar una crema dental y un enjuague bucal especiales para evitar la aparición de malos olores. Hay varios productos que no solamente ofrecen cuidados bucales completos, sino que también previenen el mal aliento. La ADA advierte que los enjuagues bucales de venta sin receta solo son una solución temporal, ya que no tratan la causa subyacente de este síntoma. Es indispensable que acuda al dentista y al higienista dental con regularidad para sus limpiezas y revisiones. Además, las visitas periódicas le ayudarán a descubrir el problema que se esconde detrás del mal aliento.
Cuándo buscar ayuda médica
Si el dentista ha descartado problemas dentales como una posible causa del mal aliento y determinado que su boca está saludable, es importante que acuda al médico. Solo un profesional de la salud puede determinar si tiene una condición médica.
Aunque el mal aliento puede ser un problema vergonzoso, no tiene por qué ser una desventaja social. Hable con su dentista si le preocupa tener este problema. Seguir las recomendaciones anteriores le puede ayudar a sentirse con más seguridad acerca del olor de su boca, incluso si el mal aliento no es un problema para usted.
Acerca de la autora: Dianne L. Sefo es higienista dental y educadora de higiene dental. Ha participado en muchas publicaciones, trabajado en consultorios privados en Nueva York y en el Sur de California y fue miembro facultativo del colegio Monroe Community College, del colegio Concorde Careers College-San Diego y de la Universidad de Nueva York.