Si a lo largo de los años su cuidado bucal ha sido más bien inconstante, pero le interesa mejorar su rutina, tenemos buenas noticias: ¡Hacerlo es muy fácil! Para ello, concéntrese primero en establecer el nuevo hábito. Una vez logrado, las personas tendemos a realizar las tareas automáticamente según la situación. Póngase metas realistas e intente cumplir con su hábito todos los días a la misma hora durante 10 semanas y tome nota de sus logros. Sin importar cuáles hayan sido sus hábitos de cuidado bucal en el pasado, nunca es demasiado tarde para empezar de nuevo con estos cinco sencillos hábitos para una boca saludable.
1. Antes que nada, cepíllese los dientes
ANTES DEL DESAYUNO
Adopte el hábito de lavarse los dientes tan pronto como se levante. La sensación de frescura en la boca no solo es una forma muy agradable de empezar el día, sino que cepillarse los dientes justo después de levantarse con pasta de dientes Colgate Total elimina las bacterias acumuladas a lo largo de la noche y previene la formación de placa con su desayuno, especialmente si incluye café.
CONSEJO: Para refrescar la boca después del desayuno, use un enjuague bucal. Si tiene prisa, enjuáguese la boca con agua. Lo importante es enjuagar los restos de alimentos para mantener una buena higiene bucal.
2. Ponga un temporizador
DOS MINUTOS
Hay muchas personas que se cepillan los dientes con regularidad, pero no durante el tiempo necesario para eliminar bien la placa. Use un temporizador para calcular dos minutos cada vez que se lave los dientes para asegurarse de cepillarlos durante el tiempo recomendado.
CONSEJO: Convierta su cepillado en algo que disfrute y aproveche como escuchar una canción, ver las noticias o ponerse al corriente con un podcast.
3. Cepíllese la lengua
DOS VECES AL DÍA
Después de cepillarse los dientes, use un limpiador lingual. Raspar su lengua con suavidad para eliminar la placa le servirá para deshacerse de bacterias que, de otro modo, podrían terminar en sus dientes. Usar hilo dental todas las noches también le ayudará en la batalla contra estos microorganismos.
CONSEJO: Los raspadores linguales y el hilo dental también pueden ayudar a mantener el mal aliento bajo control.
4. Evite los refrescos
USE UN POPOTE
Si no puede evitar tomar bebidas azucaradas como los refrescos, trate de usar un popote para que la bebida no toque los dientes. Lo mejor es dejar de tomar este tipo de bebidas por completo, ya que están asociadas con problemas de salud que van desde las caries hasta una mayor mortalidad.
CONSEJO: Para facilitar esta tarea, tenga popotes metálicos reutilizables en el cajón de los utensilios, en el coche y en la oficina.
5. Coma verduras crujientes
ENCUENTRE SU FAVORITA
Los lineamientos nutricionales del Departamento de Agricultura de los EUA (USDA) recomiendan un consumo diario de 5 a 13 porciones de fruta y verduras como parte de una dieta adulta balanceada. Comer verduras crujientes con regularidad mantiene la boca sana. Esto se debe a que masticar estimula la salivación, que actúa como un enjuague natural para la boca.
CONSEJO: Elija una verdura cruda que le guste, como la zanahoria, y consúmala como aperitivo entre comidas.