Tras observar uno o más síntomas que indican cáncer de lengua, habrá llegado el momento de llamar a tu dentista. El primer paso que tu dentista tomará será realizar un examen oral básico. La Fundación del Cáncer Bucal sugiere que son diversas las áreas involucradas en un diagnóstico adecuado, pero la lengua, garganta, mejillas, paladar superior e inferior de la boca y los nodos linfáticos del cuello deben examinarse a fondo. Si el doctor descubre un crecimiento inexplicado en la cavidad oral, tendrá que realizar una biopsia oral por cepillado o una biopsia por escisión.
Un médico deberá llevar a cabo otros métodos de detección según sea necesario. Se puede realizar una endoscopía, por ejemplo, para observar más claramente la garganta y hasta los pulmones. Las radiografías de la mandíbula, pecho y pulmones mostrarán si el cáncer se ha extendido desde la lengua, mientras que una tomografía computarizada revelará cualquier tumor maligno. Al igual que una radiografía, será útil una resonancia magnética para determinar si el cáncer ha creado metástasis, infectando otras partes del cuerpo. Si tu doctor no puede determinar las causas de tus síntomas, es posible que te refiera con un especialista en oídos, nariz y garganta.