Cómo Aliviar La Boca y La Garganta Seca

La boca seca es mucho más que una sensación incómoda de sed. Si tienes boca seca crónica, es muy importante que te trates. La saliva tiene muchas más funciones que simplemente humedecer tu boca; una de sus funciones esenciales es quitar las partículas de alimento que se quedan en los dientes. Sin la suficiente saliva, el riesgo de caries aumenta, según afirma el Instituto Nacional de Investigación Dental y Craneofacial. La saliva también protege los dientes contra los ácidos de alimentos y bebidas, y sin esta protección, tu esmalte también se expone a la erosión.

Hay muchas cosas que puedes hacer en casa para estimular el flujo de saliva y aliviar la boca y la garganta secas. Beber suficiente agua a lo largo del día podrá ayudarte a mantener la boca húmeda, al igual que humidificar tu casa. Masticar chicle sin azúcar o sorber dulces sin azúcar también puede ayudar a estimular la saliva. Es importante elegir opciones sin azúcar porque de lo contrario podrías desarrollar caries.

Tu dentista también podría recomendarte que modifiques los alimentos que ingieres. Los alimentos crujientes como las papas o las palomitas pueden secarte la boca, mientras que los jugos de fruta y las frutas pueden humectarla.

Los remedios caseros no siempre bastan. Si pasa esto, tu dentista podrá ayudarte. Los dentistas podrán recomendar productos, como la saliva artificial, que humecten la boca. La saliva artificial suele presentarse en spray o en gel, y se aplica en la boca cuando se sienta seca. Tu dentista también podrá recetarte pastillas que estimulen el flujo de saliva.

Hay muchas enfermedades que pueden causar boca seca; si tu dentista te emite un diagnóstico, la siguiente cita que deberás hacer será con tu médico. Según los NIH, la garganta seca se ha vinculado a problemas como depresión, ansiedad, deficiencias nutricionales y trastornos autoinmunes. Entre los trastornos autoinmunes están la artritis reumatoide, el lupus y el síndrome de Sjrögen.

La boca seca crónica también puede ser un efecto secundario de varios medicamentos como los que se usan para tratar la presión sanguínea, el dolor o el asma. Si los medicamentos son la causa, la dosis deberá ajustarse o quizá tengas que pedir que te receten un medicamento distinto.

La boca y la garganta seca son un problema grave. Si siempre tienes sed, tendrás que ver a tu dentista. Los dentistas podrán ayudarte a gestionar los síntomas y mantener tus dientes a salvo de los efectos de una baja cantidad de saliva.