¿Qué es una radiografía cefalométrica?

Los rayos X son una tecnología utilizada en la medicina y la odontología que consiste en dirigir una radiación (rayos X) a una zona del cuerpo para crear una imagen de la misma. Los huesos y los tejidos bloquean la radiación, de modo que las estructuras aparecen en la imagen digital o de la película como negras, blancas y grises. Las y los profesionales capacitados para ello pueden interpretar la imagen obtenida.

Las radiografías cefalométricas (o rayos X cefalométricos) muestran una vista lateral de la cabeza, exponiendo los dientes, la mandíbula y las estructuras circundantes. Esta tecnología considerada segura es con frecuencia útil o necesaria para ayudar a las y los profesionales a evaluar y atender a sus pacientes. Este tipo específico de radiografía se utiliza en el diagnóstico y la planificación del tratamiento.

Las y los profesionales dentales pueden utilizar radiografías cefalométricas para evaluar:

• Dientes impactados
• Tratamientos de ortodoncia
• Problemas de la articulación temporomandibular (ATM)
• Dientes o maxilares rotos
• Posición de la mandíbula
• Algunos cánceres
• Problemas de las vías respiratorias

Las radiografías cefalométricas utilizan básicamente la misma tecnología que las radiografías estándar, pero con algunas diferencias importantes. Este tipo de radiografía se toma desde el exterior de la boca y, por lo general, no hay que morder ningún elemento. Esta visión es increíblemente útil para muchas situaciones, ya que ofrece un gran campo de visión, incluidos los dientes, la mandíbula y el perfil.

Aunque los rayos X pueden plantear dudas a algunas personas, es bueno concentrarse en el hecho de que ofrecen una visión única del estado y la estructura del cuerpo. La información que proporcionan las radiografías cefalométricas suele ser vital para que las y los profesionales médicos y dentales le puedan brindar la mejor atención posible.

Las radiografías cefalométricas pueden usarse en estos supuestos:

• Planificación de tratamientos dentales y ortodónticos: El uso de radiografías cefalométricas puede descubrir enfermedades o daños difíciles o imposibles de localizar en un examen dental normal. Ofrecen un alto nivel de precisión para ayudar a guiar las recomendaciones de diagnóstico y tratamiento. Es habitual establecer una referencia de salud bucal y realizar un seguimiento de la evolución mediante la tecnología de imágenes.
• Apnea obstructiva del sueño: Las y los especialistas del sueño suelen recomendar la obtención de imágenes para diagnosticar esta afección del sueño que puede restringir las vías respiratorias al dormir. Las radiografías cefalométricas permiten ver los tejidos blandos además de las estructuras óseas y dentales, lo que las hace útiles para las afecciones de la garganta o las vías respiratorias.
• Trastorno temporomandibular (TTM): Afecta la articulación de la mandíbula (temporomandibular), el cartílago o el hueso y puede causar molestias. Las y los profesionales pueden recomendar radiografías cefalométricas para diagnosticar la afección, hacer un seguimiento de los cambios y orientar el tratamiento.
• Otras afecciones y lesiones: Este tipo de radiografía ofrece una vista amplia de la cabeza, el cuello y la boca, por lo que puede prescribirse para diversas afecciones y lesiones. Según la Asociación Dental Americana, el uso de rayos X depende de la salud, la edad, los factores de riesgo y los síntomas del paciente. Si no entiende por qué necesita una radiografía cefalométrica, solicite aclaración a su médico o dentista.

Es natural sentir dudas acerca de la tecnología que utiliza radiación, pero no hay razón para preocuparse. Puede que la palabra suene inquietante, pero es importante tener en cuenta que estamos expuestos a un nivel seguro de radiación en nuestra vida cotidiana. La cantidad de radiación a la que estamos expuestos por los rayos X es pequeña, según la Clínica Cleveland.

Las radiografías son indoloras y seguras, incluso para mujeres embarazadas en algunos casos. Los profesionales tomarán las medidas oportunas para limitar la exposición a ciertas partes del cuerpo colocando un protector en su pecho o estómago.

Si experimenta ansiedad por el uso de radiación, hable con el profesional de las imágenes para aliviar sus inquietudes. Según la Asociación Dental Americana, los profesionales siguen el principio ALARA (As Low As Reasonably Achievable, tan bajo como sea posible razonablemente) para limitar los daños potenciales.

Siguiendo con el criterio ALARA, las y los profesionales solo deben recomendar radiografías si:

• El riesgo de exposición se justifica en relación con los beneficios.
• El número de exposiciones es tan bajo como sea posible razonablemente.
• La exposición de los pacientes está dentro de los rangos permitidos.

Puede estresarle exponerse a radiografías, pero puede irse en calma sabiendo que son una técnica indolora y segura con múltiples beneficios. Esta tecnología de imágenes proporciona a las y los profesionales una ingente cantidad de información que guiará su diagnóstico y tratamiento. Ahora ya puede entender cuándo se utilizan las radiografías cefalométricas y por qué son esenciales en muchos casos.