¿Hay algo más molesto que una garganta seca y carrasposa? La deshidratación, las alergias, el resfriado común o dormir con la boca abierta pueden causar sequedad y molestias en la garganta. Descubrí cómo librarte de la garganta seca analizando una a una las siguientes causas y estarás más cerca de conseguirlo.
Deshidratación
La saliva está compuesta principalmente de agua, por lo que tiene sentido que la saliva se vuelva espesa y pegajosa si se deshidrata. Si a tu organismo le faltan reservas de agua, es posible que tu saliva no llegue a humedecer bien la boca o la garganta.
Según el Ministerio de Salud de la Nación, una persona debería tomar en promedio alrededor a dos litros de agua por día. Si no tomás suficiente agua, planteate aumentar su consumo. Sin embargo, si padecés alguna enfermedad que afecta a los riñones, el hígado, el corazón o la tiroides, o si tomás medicamentos que favorecen la retención de líquidos, hablá con tu médico antes de aplicar cambios relevantes en tu rutina de consumo de agua.
Alergias
La rinitis alérgica o estacional y las reacciones alérgicas al polvo, el moho o los animales pueden producir una sensación de garganta seca. Cuando tu nariz atrapa partículas a las que tu organismo es sensible, la producción de mucosa aumenta y los conductos nasales se inflaman. Esto puede causar sequedad, picazón o dolor de garganta, así como congestión o moqueo nasal, informa la Asociación Argentina de Alergia e Inmunología Clínica.
El humo y otros irritantes presentes en el aire pueden tener el mismo efecto, incluso si no tenés alergia. La Fundación para el estudio del asma y otras enfermedades alérgicas (Fundaler) recomienda a los enfermos de rinitis que utilicen antihistamínicos o descongestionantes de venta libre o con receta para aliviar los síntomas de la alergia y la sequedad de garganta.
Resfriado común
¿La garganta seca puede ser una señal de resfriado inminente? La Asociación Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) enumera la irritación o cosquilleo de la garganta como uno de los tantos síntomas de un resfriado común. Como probablemente sepas, otros de sus síntomas son secreción o congestión nasal, estornudos, fiebre, lagrimeo y tos leve.
Tomar medicamentos de venta libre para el resfriado puede mejorar sus síntomas. Hacer gárgaras con agua salada tibia, descansar más y tomar mucha agua también pueden contribuir a tratar un resfriado. Si sentís síntomas de gripe, como fiebre alta, tos intensa o fatiga prolongada durante algunas semanas, consultá a tu médico.
Garganta seca al despertar
Si sientes la garganta seca al despertar pero el efecto desaparece al avanzar el día, tal vez respires por la boca mientras dormís. Tener la nariz taponada o dormir boca arriba puede dificultar la respiración por la nariz durante la noche y, como reacción natural, hacer respirar por la boca. Tomar un vaso de agua por la mañana puede ayudar a mejorar la sensación de tu garganta.
Una garganta seca al despertar también es un síntoma de apnea del sueño. La Fundación Argentina del Tórax (FAT) explica que la apnea de sueño es una condición en la que los individuos dejan de respirar durante la noche. Las personas que padecen apnea del sueño habitualmente también roncan, se ahogan o se les entrecorta el aliento mientras duermen, de modo que de día se sienten cansadas a causa del sueño interrumpido. Alrededor de 300.000 personas en Capital y Gran Buenos Aires sufren de apnea del sueño. Consultá a un médico si crees que podrías ser una de esas personas, ya que podrá darte consejos que te ayudarán a dormir mejor.
Boca seca y garganta seca
Si las glándulas salivales no producen suficiente saliva, tanto la boca como la garganta pueden sentirse secas. Esta sequedad aumenta el riesgo de padecer caries dental, dado que la saliva elimina los restos de comida y protege los dientes de los alimentos y bebidas ácidas. Si sufrís de boca y garganta secas de forma ocasional, podés probar remedios caseros como tomar agua, masticar chicle sin azúcar, chupar caramelos sin azúcar y humidificar tu hogar.
Para descubrir cómo acabar con la garganta seca, primero tenés que identificar cuál es el origen del problema. Muchas veces, la solución será tan simple como tomar más agua. Sin embargo, la garganta seca puede tener su origen en una afección médica, así que consultá a tu médico si tenés otros síntomas relacionados y acudí al odontólogo con regularidad para que evalúe tu salud dental.
