Busque un dentista en Internet. Muchos consultorios y clínicas odontológicas tienen sitios que presentan a los profesionales, el tipo de servicios ofrecidos, el personal del servicio y el tratamiento dado a los pacientes. Si encuentra algún consultorio que parezca adecuado a sus necesidades, hable con sus amigos y vecinos y busque referencias.

Después de encontrar el dentista adecuado, converse con él, o con el personal de la clínica, con respecto a su problema dental y sus aprehensiones y recelos con relación a los procedimientos a ser realizados. Es muy importante mantener una comunicación franca y abierta con su dentista. Esto hace su experiencia más tranquila y agradable.

El dentista le explicará a usted el tipo de tratamiento recomendado para su caso. Él también le informará sobre los detalles del procedimiento y usted podrá aclarar cualquier duda o preocupación que tenga sobre el tratamiento.

Si está nervioso o tenso antes de cualquier procedimiento, el dentista puede aplicar óxido nitroso (un agente gaseoso analgésico y sedante), para hacer que usted se relaje durante el tratamiento. Otros medicamentos también se pueden usar, dependiendo del nivel de miedo que el paciente presente. El dentista y el personal auxiliar harán todos los esfuerzos para hacer su consulta una experiencia tranquila y agradable.