Pareja joven contenta usando hilo dental en el baño

Diez consejos de higiene dental para una limpieza más profunda

¿Cree ir por buen camino con su rutina diaria de higiene bucal? Llévela al siguiente nivel con algunos ajustes simples de técnica. En conjunto, estos 10 consejos le ayudarán a pulir sus hábitos de salud dental y a mantener su sonrisa radiante y brillante.

1. Use una técnica adecuada para el cepillado

Hay una forma incorrecta y una correcta para cepillarse los dientes. Para un cepillado más profundo:

  • Use un cepillo de cerdas suaves
  • Comience por el borde de las encías y coloque el cepillo en un ángulo de 45°
  • Cepille la parte externa de los dientes, la parte interior y todos los molares
  • Asegúrese de llegar a cada rincón y resquicio de los dientes
  • Cepille suavemente las encías y la lengua

2. Cepíllese los dientes durante el tiempo suficiente

Cepíllese los dientes durante al menos dos minutos por sesión. Use un reloj de arena o su canción favorita para ayudarse a usted y a su familia a controlar el tiempo.

3. Elija el cepillo adecuado

Manual o eléctrico, tipo de cerdas y mango, tamaño del cabezal y, por supuesto, ¡el color! Cuando se trata de elegir un cepillo de dientes, hay muchas opciones. Elija un cepillo con cerdas suaves y de cabezal chico a mediano según se recomienda. El resto depende de usted.

4. Use una pasta dental con flúor

Asegúrese de que su pasta dental contenga flúor: esto ayudará a combatir la placa y a prevenir las caries.

5. Use el hilo dental correctamente

Igual que con el cepillado, hay una forma incorrecta y una forma correcta de usar hilo dental. Recuerde lo siguiente:

  • Corte 45 cm de hilo dental
  • Enrolle la mayor parte del hilo alrededor de los dedos medios, dejando de 2.5 cm a 5 cm de ambos lados
  • Asegúrese de que el hilo dental esté ajustado entre el dedo pulgar e índice. Después, deslícelo suavemente entre los dientes, usando secciones limpias a medida que avanza de un diente a otro
  • Pase el hilo dental suavemente debajo del borde de las encías

6. Use un enjuague bucal

Los enjuagues bucales refrescan el aliento, reducen la placa y la gingivitis, blanquean los dientes y alivian la sequedad bucal. Además, con sus beneficios antimicrobianos y el flúor adicional, ¡se va a preguntar por qué esperó tanto para incorporarlo en su rutina diaria!

7. Limpie su cepillo

Para mantener su cepillo de dientes limpio, simplemente enjuáguelo y déjelo secar al aire después del usarlo. Evite taparlo o compartirlo, ya que esto genera y propaga bacterias.

8. Cambie su cepillo

Reemplace su cepillo de dientes cada 3 a 4 meses y después de recuperarse de una enfermedad. La mayoría de los cepillos de dientes manuales y eléctricos tienen un indicador de color en las cerdas. Si usted es madre, padre o tutor/a, tenga en cuenta que cuanto más frecuentemente le cambie el cepillo de dientes a su hijo/a, más motivación sentirá para cepillarse.

9. Use un raspador de lengua

Los raspadores de lengua sirven para retirar el exceso de bacterias de la boca. Agregue esta práctica a su rutina diaria de cuidado bucal para eliminar las bacterias y refrescar su aliento. Para mayor comodidad, puede elegir un cepillo de dientes que tenga un raspador incluido en la parte posterior.

10. Si come algo, no olvide lavarse los dientes

Cepillarse los dientes dos veces al día, generalmente después del desayuno y la cena, ya debería ser una rutina incorporada. Pero si en la noche se le antoja algo, será necesario cepillarse de nuevo. Las galletas y el helado llenan la boca de azúcar y bacterias, y dormir de 7 a 8 horas después de comer sin cepillarse los dientes permite que las bacterias se reproduzcan y se propaguen.

Al incorporar estos consejos, hábitos y rutinas, su higiene dental pasará de buena a excelente. Y no olvide visitar a su dentista dos veces al año: así podrá lucir su sonrisa saludable y brillante con orgullo.

La finalidad de este artículo es fomentar la comprensión y el conocimiento de temas generales de salud oral. Su propósito no es sustituir la opinión, el diagnóstico o el tratamiento profesionales. Solicita siempre la opinión experta de tu dentista u otro proveedor de salud calificado y consúltales cualquier pregunta que tengas en relación con alguna enfermedad o tratamiento médico.