Hay muchos minerales presentes de forma natural que tienen un efecto positivo en el cuerpo. El calcio mantiene los huesos fuertes, el hierro lleva oxígeno a las células sanguíneas y el zinc ayuda a que el sistema inmunológico funcione correctamente. Otro mineral que protege el cuerpo es el flúor. Presente como parte de compuestos de fluoruro en la tierra y en las rocas, el flúor suele añadirse a las cremas dentales para beneficio de la salud de los dientes. En las últimas décadas, el flúor en las cremas dentales ha tenido un papel importante para la reducción de las caries y la mejora de la salud general de la población mundial.
Qué hace el flúor
El flúor dental apoya a su esmalte dental de dos formas: Cuando los dientes de una persona todavía están empezando a brotar, este ingrediente desarrolla el esmalte para que se vuelva fuerte para resistir las caries y el deterioro. Una vez que los dientes brotan, el flúor en las cremas dentales, los enjuagues bucales y hasta el agua corriente mantienen el esmalte fuerte para que pueda resistir los ácidos producidos por las bacterias en la boca cuando comemos alimentos azucarados. El flúor también tiene un efecto remineralizador en los dientes, lo que reconstruye el esmalte desgastado o debilitado antes de que desaparezca.
Por qué la crema dental tiene flúor
Hay varias formas en las que una persona puede obtener flúor. Una es beber agua que contenga este mineral. Aproximadamente tres cuartos del suministro público de agua en los EUA tiene flúor, observa la Asociación Dental Americana (ADA) de modo que muchas personas pueden obtener flúor con solo tomar agua corriente. Otra opción, que suele usarse para personas que no tienen acceso a agua con flúor o que tienen otros motivos para evitarla, es tomar suplementos de flúor o recibir aplicaciones de barniz de flúor por parte de su higienista dental durante las consultas rutinarias.
Beber agua con flúor protege los dientes del deterioro, pero la cantidad de flúor en el agua no siempre es suficiente para una protección completa. Este es uno de los motivos por los que el flúor se encuentra presente en muchas cremas dentales. Otra razón, según la ADA, es que incluir este elemento en las cremas dentales ha conducido a una enorme reducción en el número de caries que han tenido los estadounidenses desde el año 1960. El contener flúor también es uno de los requerimientos que debe cumplir una crema dental para obtener el Sello de Aceptación de la ADA, uno de los certificados más importantes para los productos actuales de cuidado bucal. La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda y apoya oficialmente el uso de cremas dentales con flúor en todo el mundo, sobre todo en los lugares que no tienen (o no pueden) añadir flúor al suministro de agua.
Cómo elegir una crema dental
Aunque existen cremas dentales que no contienen flúor, sigue siendo uno de los ingredientes más importantes a tener en cuenta a la hora de elegir una crema dental. Esto, además del sello de la ADA, son las dos cosas más esenciales que debe buscar en una crema dental. Otras características, como el sabor y la textura (si es una crema o un gel) son, en realidad, una cuestión de preferencia.
Si usted tiene problemas más específicos, como sensibilidad dental, o si ha tenido gingivitis en el pasado, tal vez quiera buscar cremas dentales que contengan ingredientes adicionales especiales para estas cuestiones, como por ejemplo, regeneradores de esmalte o control de la placa.
Uso de cremas dentales con flúor
Para aprovechar al máximo su pasta dental con fluor, úsela según las instrucciones del dentista. Por lo general, lavarse los dientes al menos dos veces al día es lo más fundamental para su rutina. Sin embargo, la cantidad de crema dental que puede usar depende de la edad de la persona. Por lo general, se recomienda que los niños pequeños de entre tres y seis años no usen una cantidad mayor al tamaño de una gota, mientras que para niños menores de tres años se recomienda una cantidad aún más pequeña del tamaño de un grano de arroz. Para mayor protección, y sobre todo si lo recomienda su dentista, usted y todos los niños mayores de seis años también pueden usar un enjugue bucal que contenga flúor después de cepillarse los dientes.
Recuerde que lavarse los dientes es tan solo el primer paso para tener una boca saludable. Reducir la ingesta de alimentos que ocasionan las caries (como los dulces) y acudir al dentista y al higienista dental para limpiezas profesionales dos veces al año ayudará enormemente a mantener sus dientes sanos y fuertes.