Un quiste bucal es un saco delgado y lleno de líquido en el interior de la boca. También llamado quiste mucoso bucal o mucocele, este saco es inofensivo e indoloro, según los Institutos Nacionales de Salud de los E.U.A. (NIH, National Institutes of Health). Sin embargo, pueden ocasionar malestar por la sensación que provoca el bulto en el interior de la boca.
Los quistes tienden a presentarse en la parte interior de los labios, pero también pueden formarse en la lengua, en el paladar, en el interior de las mejillas, en la parte inferior de la boca o alrededor de perforaciones en la lengua o en los labios. Los quistes en la parte inferior de la boca se llaman ránulas, y los quistes en la encía se llaman épulis. El saco de mucocele es azulado y translúcido y contiene un líquido transparente. Por lo general, su dentista podrá diagnosticar un quiste mucoso con tan solo mirarlo.
Causas y prevención
Se cree que la causa de estos sacos llenos de líquido en los labios, encías o en el interior de las mejillas es debido a succionar el tejido entre los dientes. Evitar succionar las mejillas o los labios intencionalmente puede prevenir la formación de algunos quistes, aunque pueden aparecer otros de forma aleatoria.
Tratamiento para los quistes bucales
Los quistes mucosos usualmente no requieren de ningún tratamiento, ya que por lo general se rompen por sí mismos, de acuerdo con los NIH. Siga con sus cuidados bucales habituales en casa usando una crema dental apropiada.
Si el quiste bucal se vuelve molesto o se irrita, interfiere con la masticación o no desaparece después de un par de semanas, consulte a su dentista. Él podrá usar una aguja esterilizada para perforar la parte superior del quiste y drenar el líquido, después de lo cual desparecerá al cabo de un tiempo.
Remoción del quiste
Algunas veces, su dentista o cirujano dental podrá optar por retirar el quiste quirúrgicamente, sobre todo si regresa después de haber sido perforado. Las complicaciones de este procedimiento son muy poco frecuentes, y conllevan los riesgos normales, como infecciones o reacciones adversas ante la anestesia local. Consulte siempre a su dentista o especialista dental y asegúrese de entender los riesgos.
Si el quiste no se revienta por sí mismo y usted no recibe tratamiento, podría formarse una protuberancia permanente. Estas protuberancias son inofensivas, pero consulte a su dentista si se forma algo nuevo en su boca y tiene algún motivo para preocuparse. Es importante que se asegure de que su dentista evalúe el área mediante un examen y, en caso necesario, con una radiografía. La salud bucal es parte de la salud general.