Cuando un diente flojo se afloja aún más, ¡lo mejor es sacarlo! Sin importar si su hijo es valiente o más bien miedoso, necesitará un poco de ayuda de sus padres. Una vez que haya salido el diente, puede que las encías sangren un poco. Este sangrado debería detenerse después de un par de minutos, aunque la zona podría permanecer irritada durante uno o dos días.
Algunos consejos para antes y después de perder un diente son los siguientes:
- quitarlo con las manos limpias o con una gasa húmeda,
- reducir el sangrado ejerciendo presión sobre la zona con un pañuelo o gasa durante un par de minutos,
- cepillar el área con suavidad durante uno o dos días.
Asegúrese de consultar con su dentista si el sangrado no se detiene o si alguna parte del diente de leche sigue alojada en el hueco. Sobre todo, enfóquese en mantener una buena higiene bucal durante el proceso. La pérdida de los dientes de leche indica que su hijo está madurando y que sus dientes permanentes están listos para brotar. Los niños de esta edad deberían cepillarse los dientes con una crema dental que contenga fluoruro, debido a las ventajas que tiene para combatir la caries. Los cepillos dentales con personajes de caricaturas suelen venir a juego con cremas dentales para hacer del cepillado dental una actividad más divertida.
Los próximos dientes flojos
¿Y ahora qué sigue? Su hijo perderá 20 dientes de leche a lo largo de cinco a siete años y mostrará señales de un hermoso crecimiento de la mandíbula durante este tiempo. La pérdida de los dientes de leche ocurre durante un largo periodo de tiempo, pero es un momento emocionante para los niños. Para los padres, madres y tutores, es momento de mantener una buena higiene bucal. Durante todo este tiempo, acuda a citas regulares con su dentista para supervisar el brote de los dientes permanentes y para que reciba tratamientos preventivos, como la limpieza y el pulido de los dientes o la aplicación de fluoruro. Recuerde que después de que su hijo pierda todos sus dientes de leche, los dientes adultos tendrán que perdurar toda una vida para masticar, hablar y sonreír.
Acerca de la autora: Donna Rounsaville, RDH, BS, lleva 31 años desempeñándose como higienista dental en el sector privado. Ha utilizado su experiencia en la prevención de problemas dentales y en la importancia de una dieta saludable para educar a los niños de las escuelas locales de su ciudad natal: Flemington, Nueva Jersey. A Donna le apasiona el control de infecciones y la seguridad de los consultorios de los trabajadores dentales, y les brinda capacitaciones anuales a los colegas de su consultorio. Como líder activa de Girl Scouts y participante de la liturgia infantil de su iglesia, Donna utiliza sus habilidades de comunicación y liderazgo para motivar a las personas jóvenes de su comunidad. Escribe para Colgate desde el año 2013.