Causas de los dientes de conejo
Empujar la lengua
La AAPD describe el empujar la lengua como un "posicionamiento anormal de la misma y una desviación del patrón normal de deglución".Empujar la lengua contra los dientes por momentos breves probablemente no afecte a la posición de los dientes. Sin embargo, si la lengua presiona los dientes delanteros de manera constante, el hábito puede resultar en una mordida abierta o en dientes incisivos protuberantes.
Chuparse el dedo
Chuparse el dedo es otra de las causas de los dientes de conejo, de acuerdo con la Asociación Dental Americana (American Dental Association). La fuerza ejercida al succionar puede afectar a la boca, los dientes y la alineación del paladar. El hábito a menudo desaparece entre los 2 y los 4 años de edad. Cuando este no es el caso, es posible que padres y madres puedan ayudar a frenar este comportamiento. Una opción es elogiar a tu pequeña o pequeño cuando pase cierto tiempo sin chuparse el dedo. El hábito también puede ser una respuesta a la ansiedad, por lo que es recomendable que padres y madres hagan su mejor esfuerzo para tranquilizar a su hijo o hija con el fin de eliminar su necesidad de meterse el dedo en la boca.
Alineación natural
Algunas veces, los dientes protuberantes se presentan de forma natural y causan los llamados dientes de conejo. Una sobremordida puede ser hereditaria. En este caso, no hay nada que padres y madres puedan hacer para evitar la condición. Lo que sí pueden hacer, sin embargo, es programar una cita con su ortodoncista si la mandíbula y los dientes permanentes de su niño o niña se ven torcidos. La Asociación Americana de Ortodoncistas (American Association of Orthodontists) recomienda que niños y niñas hagan una visita al ortodoncista para cuando cumplan los 7 años. Una vez en el consultorio, es muy probable que te puedan decir cómo se verá la mordida de tu hijo o hija. Después de esta primera cita, tu ortodoncista podrá formular un plan de tratamiento para corregir la mordida y hacer las preparaciones para la colocación de brackets, que tendría lugar entre los 8 y los 14 años de edad.