El uso de retenedores después de los brackets es un elemento esencial para el mantenimiento de un tratamiento de ortodoncia, ayudando a mantener la mordida y la sonrisa logradas con los brackets en los últimos años. Leé más sobre la importancia de usar retenedores después de los brackets.
Retenedores después de los brackets: tipos y mantenimiento
Cuando el tratamiento de ortodoncia haya terminado, le quitarán los brackets a tu hijo. Esto marcará el final de la parte más dificultosa del camino hacia una sonrisa hermosa y una dentadura alineada. En este punto, el ortodoncista puede prescribir el uso de un retenedor dental. Creele cuando te diga que el éxito del tratamiento de ortodoncia depende del uso diligente de los retenedores.
El uso de retenedores después de los brackets es un elemento esencial para el mantenimiento de un tratamiento de ortodoncia, ayudando a mantener la mordida y la sonrisa logradas con los brackets en los últimos años.
El mismo ortodoncista que llevó a cabo el tratamiento de ortodoncia fabricará los retenedores. Los retenedores se hacen tomando una impresión de los dientes superiores e inferiores. La impresión se envía a un laboratorio dental, y los retenedores se fabrican con alambre y material acrílico. Los retenedores dentales se devuelven al ortodoncista, que los colocará en los dientes de tu hijo para fijarlos. Estos retenedores deberán usarse varios años o, en algunos casos, con carácter indefinido.
¿Por qué son necesarios los retenedores?
Antes de que a tu hijo le colocaran los brackets, el ortodoncista estudió concienzudamente sus dientes y mandíbulas y diseñó el plan de tratamiento idóneo para moverlos hasta la alineación adecuada. Como los huesos y ligamentos sujetan la dentadura en su posición, moverlos no es tarea fácil. La mordida se ha corregido y los dientes lucen hermosos, pero aún no se han estabilizado en la nueva ubicación. Hace falta tiempo para que el hueso y los ligamentos se aprieten y sostengan los dientes de forma segura.
Los brackets presionan los dientes a fin de producir cambios en los ligamentos y los huesos y, con ello, hacer posible el movimiento. Este proceso es lento y sigue una planificación precisa hasta que los dientes alcanzan finalmente la posición correcta.
Los retenedores son vitales para preservar los magníficos resultados logrados por el ortodoncista. Sin el uso de un retenedor después de los brackets, los dientes de tu hijo podrían desalinearse lentamente. ¡Volvería al punto de partida!
¿Qué tipos de retenedores existen?
Hay dos tipos de retenedores para después de los brackets: fijos y removibles. El ortodoncista te ayudará a identificar qué tipo de retenedor necesita tu hijo. Ciertos problemas dentales pueden requerir unos retenedores específicos, y algunos retenedores también necesitan más mantenimiento que otros.
Retenedores fijos: El tipo de retenedor fijo suele ser un alambre fino en la parte posterior de los dientes delanteros (inferiores o superiores), adherido con un cemento similar al que se aplica en los brackets. Como este tipo de alambre comprende varios dientes, se debe usar un enhebrador dental o limpiador similar para acceder a los espacios interdentales, del mismo modo que las personas con brackets deben usar hilo dental. Aunque este tipo de retenedor exige una limpieza más laboriosa, ofrece el mejor resultado porque el alambre adherido mantiene a la perfección los dientes enderezados.
Retenedores removibles: Los retenedores removibles se elaboran para los dientes superiores o inferiores ajustándose a cada arco con un diseño de material acrílico y un alambre a lo largo de los dientes. Al ser removible, este tipo de retenedor dental facilita la limpieza de los dientes, pero el paciente debe acordarse de usarlo a diario. El ortodoncista te indicará el uso de retenedores dentales. Tal vez te indique que tenés que usarlos durante el día unos meses, durante la noche muchos años o incluso durante el resto de la vida.
Un inconveniente de los retenedores removibles para después de los brackets es que se pueden perder o dañar, incluso derretirse o deformarse si se exponen a altas temperaturas. Si se envuelven los retenedores en toallitas o pañuelos de papel, tienden a tirarse por accidente. Los ortodoncistas suelen cobrar el reemplazo de los retenedores, por lo que los usuarios de retenedores removibles deben encontrar una forma segura de conservarlos en un estuche de plástico.
Mantenimiento de los retenedores
Durante (y después) del uso de ambos tipos de retenedores, se requiere un mantenimiento periódico, con visitas rutinarias al odontólogo para prevenir las caries y limpiar los dientes alineados. El odontólogo puede inspeccionar en detalle un retenedor fijo para asegurarse de que esté colocado de forma segura y en la posición adecuada, además de observar si se acumula placa y sarro.
El ortodoncista de tu hijo también te dará instrucciones para limpiar los retenedores removibles, que puede incluir cepillarse con pasta dental antes de usar el retenedor y después de quitarlo o usar un limpiador efervescente.
La mayoría de los pacientes han invertido mucho dinero en los tratamientos de ortodoncia. El uso de un retenedor después de los brackets es un elemento esencial del tratamiento para garantizar una larga vida de sonrisas felices y alineadas.
La finalidad de este artículo es fomentar la comprensión y el conocimiento de temas generales de salud oral. Su propósito no es sustituir la opinión, el diagnóstico o el tratamiento profesionales. Solicita siempre la opinión experta de tu dentista u otro proveedor de salud Calificado y Dile siempre cualquier pregunta que tengas en relación con alguna enfermedad o tratamiento médico.