Una pareja joven en el espejo cepillandose los dientes

¿Cepillarse los dientes en exceso es perjudicial?

Si tu higiene bucal te importa, es posible que te cepilles los dientes al menos dos veces al día. Incluso podés sentir la necesidad de cepillarte los dientes después de cada comida porque sabés que hacerlo de forma regular es un buen hábito para eliminar la placa y ayudar a prevenir las caries. Así que es probable que te preguntes: "¿Puedo estar cepillándome los dientes de forma excesiva?". Resulta que, cuando se trata de cepillarse los dientes, podemos decir que demasiado de algo bueno nunca es bueno.

Riesgos de cepillarse los dientes en exceso

Cepillarse los dientes en exceso no solo se refiere a "cuánto" te cepillás los dientes, sino también a "cómo" los cepillás. El cepillado compulsivo o con demasiada fuerza puede provocar problemas de salud bucal y poner tus dientes en riesgo de abrasión dental, sensibilidad dental y retracción de las encías.

Abrasión del cepillo de dientes

La abrasión dental se refiere a la pérdida de estructura dental por fuerzas mecánicas de un objeto extraño, de acuerdo con una tesis elaborada para la Universidad Nacional de Córdoba . En este caso, el uso del cepillo de dientes con una fuerza excesiva desgasta el esmalte dental y, eventualmente, las estructuras más blandas de la dentina y el cemento. La abrasión puede observarse como manchas desgastadas, brillantes y, a menudo, amarillas o marrones en el diente cerca de la línea de las encías. Las hendiduras, una marca en el diente en forma de cuña o en V a lo largo de la línea de las encías, también es un signo de abrasión.

Sensibilidad dental

Cuando la abrasión producida por el cepillo de dientes desgasta el esmalte dental, las terminaciones nerviosas de la capa de la dentina quedan expuestas o lo suficientemente cerca de la superficie como para provocar sensibilidad dental. Esta sensibilidad puede causar molestias o dolor cuando los dientes están expuestos a estímulos calientes, fríos, dulces o ácidos, o cuando te cepillás los dientes.

Retracción de las encías

El cepillado excesivo e inadecuado continuo también puede hacer que las encías se retraigan. Cuando esto sucede, el cemento más blando de la raíz queda expuesto y vulnerable. El cemento expuesto no solo se desgasta y marca fácilmente, lo que provoca sensibilidad y dolor, sino que también produce un mayor riesgo de caries.

Tratamientos para proteger los dientes después de un cepillado en exceso

Si se deja sin tratar, la abrasión dental y la retracción de las encías pueden provocar caries e incluso la pérdida de dientes. Para abordar la abrasión producida por el cepillo de dientes y la sensibilidad dental, el dentista puede recomendarte tratamientos para proteger el diente y cubrir la dentina expuesta. Estos tratamientos pueden incluir el uso de un barniz de flúor para fortalecer la superficie de los dientes, unir un empaste del color del diente sobre el área erosionada o cubrir la superficie expuesta con una carilla. Si el cepillado excesivo hizo que las encías se retrajeran, es posible que nunca vuelvan al punto en el que estaban. Es posible que necesités un injerto de encía mediante cirugía para reemplazar el tejido faltante de la encía y proteger el cemento expuesto en algunos casos.

Prevención mediante herramientas y técnicas de cepillado adecuadas

La buena noticia es que prevenir el cepillado excesivo es tan simple como adoptar las herramientas y las técnicas adecuadas para cepillarse los dientes. Comenzá así:

  1. Usá un cepillo de dientes de cerdas suaves. Es posible que pienses que las cerdas duras limpiarán mejor los dientes. Aún así, aumentan las posibilidades de abrasión dental y retracción de las encías.
  2. Revisá tu pasta dental. La pasta dental con agentes altamente abrasivos también puede acelerar el proceso de pérdida de dientes. Buscá una pasta dental que sea rica en calcio y flúor para ayudar a fortalecer el esmalte dental.
  3. Usá la técnica adecuada. ¿Querés saber si te estás cepillando demasiado fuerte? Revisá tu cepillo de dientes. Si las cerdas se aplanan y se deshilachan en un par de semanas, es posible que estés ejerciendo mucha presión. Intentá usar esta técnica de cepillado.
  4. No te cepillés inmediatamente después de comer. Después de comer o tomar bebidas, esperá 60 minutos como mínimo para cepillarte los dientes, especialmente si consumiste algo ácido como limones o gaseosas. En su lugar, tomá agua o masticá chicle sin azúcar para refrescar el aliento mientras esperás.
  5. Revisá los demás hábitos. El cepillado excesivo no es la única causa de abrasión. Supongamos que tenés la costumbre de abrir botellas con los dientes, sostener clavos o alfileres con la boca o morderte las uñas. En ese caso, esas actividades también podrían causar abrasión dental o incluso quebrar los dientes. Los piercings en los labios o la lengua también pueden desgastar el esmalte.

Simplemente recordá que, si estás buscando una sonrisa impecable, cepillarte en exceso no es la respuesta. Cuando usás las herramientas apropiadas e implementás una técnica de cepillado suave pero completa, ganarás la carrera por tener dientes limpios y una boca saludable en todo momento.

La finalidad de este artículo es fomentar la comprensión y el conocimiento de temas generales de salud oral. Su propósito no es sustituir la opinión, el diagnóstico o el tratamiento profesionales. Solicita siempre la opinión experta de tu dentista u otro proveedor de salud calificado y consúltales cualquier pregunta que tengas en relación con alguna enfermedad o tratamiento médico.