¿Tu lengua tiene una apariencia extraña? Cuidado, podría estar tratando de decirte algo.
¿Sabías que tu lengua puede reflejar tu estado de salud en general? Es verdad. A menudo, cuando algo no funciona del todo bien en el cuerpo, la lengua tiene mucho que decir al respecto. Especialmente en lo que se refiere a la deshidratación. Si bien es cierto que la deshidratación no se localiza solo en una zona concreta, una lengua deshidratada puede indicar que hace falta hidratarse de forma urgente.
A continuación veremos qué es una lengua deshidratada, los signos y causas de la deshidratación, la apariencia de una lengua saludable y los posibles problemas de salud relacionados con una lengua deshidratada, así como varios consejos de prevención y tratamiento.
¿Sentís la lengua seca o incluso hinchada? Si dijiste "sí" a cualquiera de estos síntomas, podés tener la lengua deshidratada. Atención: Una lengua seca y deshidratada no es solo una señal de tener la boca deshidratada: es una señal de que todo el cuerpo necesita más líquido.
Si no te hidratás correctamente, el organismo intenta conservar el líquido que tiene. Por eso uno de los primeros signos de deshidratación se detecta en la boca, en forma de disminución de la producción de saliva. De ahí que sientas la lengua seca o incluso hinchada.
El agua constituye del 50% al 70% de tu peso corporal, y es esencial para la supervivencia. La deshidratación es un estado de carencia por el cual el cuerpo no tiene la cantidad de líquido (o agua) que necesita para funcionar correctamente. Por lo general, una persona sana debe beber unos 4-6 vasos de agua al día. No obstante, ciertas condiciones pueden aconsejar beber más o menos. Lo mejor es consultar con un médico para saber con certeza cuál es la cantidad diaria de agua que cada persona necesita beber.
La mayoría de los casos de deshidratación son moderados y se pueden subsanar con solo aumentar la ingesta de agua o líquidos. En estas circunstancias, la micción es oscura y menos frecuente, e incluso puede producir dolor de cabeza. Además, una cantidad insuficiente de saliva puede afectar a la salud bucal, con un mayor riesgo de desarrollar placa, caries y gingivitis.
Además, una deshidratación más grave comienza a afectar al funcionamiento general del organismo. Puede producir confusión, irritabilidad, apatía, palpitaciones e incluso pérdida del conocimiento.
A veces, la deshidratación se produce por razones bien simples. Tal vez no hemos bebido suficiente agua porque estábamos ocupados o no disponíamos de líquidos durante un viaje. Otras posibles causas son:
Una lengua sana tiene un aspecto rosado y está cubierta de pequeños nódulos (papilas). También está húmeda, con la saliva ayudando a descomponer los alimentos antes de la digestión, además de revestir y proteger los dientes de bacterias y caries. Si tu lengua está seca y áspera, puede indicar una falta de hidratación.
Si sentís que te hidratás y tomás suficiente agua a diario pero tenés la lengua seca y deshidratada, tal vez haya algo más. Si el problema es crónico, es conveniente que lo comentes con tu profesional de atención médica lo antes posible.
¿Qué causa la sequedad lingual o bucal? Algunas causas son:
Para prevenir la sequedad de la lengua, tomá muchos líquidos. También es útil tomar alimentos con alto contenido de agua, como frutas y verduras.
Si ya tenés la lengua seca, lo primero que tenés que hacer es tomar más agua. También podés chupar cubitos de hielo o pastillas para aliviar la sensación de boca seca que a menudo la acompaña.
En caso de tener la lengua deshidratada, también es fundamental mantener los dientes protegidos de los efectos de la escasez de saliva. Cepillate los dientes dos veces al día y usá hilo dental a diario. También podés usar un enjuague bucal sin peróxido ni alcohol para evitar la sensación de sequedad bucal.
Si tenés la lengua deshidratada, ahora ya sabés qué puede significar y cómo tratarla. Como te contamos, la deshidratación puede deberse a causas bien simples como no beber lo suficiente cuando estamos ocupados. Pero también puede tener su origen en un estado de fiebre o vómitos. Recordá, una lengua sana es rosada y húmeda. Si se siente seca, el primer paso es tomar más agua. También se puede chupar hielo. Si la sensación de tener la lengua seca es más crónica, consultá con tu médico de inmediato. Te orientará para recuperar una sonrisa saludable y bien hidratada.
La finalidad de este artículo es fomentar la comprensión y el conocimiento de temas generales de salud oral. Su propósito no es sustituir la opinión, el diagnóstico o el tratamiento profesionales. Solicita siempre la opinión experta de tu dentista u otro proveedor de salud calificado y consúltales cualquier pregunta que tengas en relación con alguna enfermedad o tratamiento médico.
