Vista cercana de una mujer cepillandose los dientes

Qué son y cómo funcionan los prismas del esmalte

Los dientes están hechos de varias capas de tejido, cada una con su propia forma y función. Existen cuatro tipos de tejido dental. El tejido que se encuentra al centro es la pulpa, que es suave y está constituida de nervios, tejido conectivo y vasos sanguíneos. La pulpa está rodeada por otras tres capas de tejidos más duros: la dentina, el cemento y el esmalte.

El esmalte dental es el material que cubre el exterior de los dientes, justo por encima de la capa de dentina. ¿De qué está hecho el esmalte? ¡Buena pregunta! Está constituido por pequeños segmentos conocidos como prismas del esmalte. Digamos que el esmalte es algo así como la piel de los dientes. De la misma manera en que la piel protege a nuestros órganos internos, el esmalte sirve para proteger el interior de los dientes. A continuación, te contamos lo que hay que saber acerca de los prismas del esmalte, su función, y cómo proteger el esmalte.

¿Qué son los prismas del esmalte?

Imaginate que tenés un microscópico de alta potencia. Si hicieras zoom para ver el esmalte de tus dientes, verías unos prismas pequeños en forma de pez o del ojo de una cerradura que son los que constituyen el esmalte. En una descripción de la Universidad Nacional de La Plata, muestra cómo estas piezas en forma de pez o del ojo de una cerradura se unen entre sí para formar los prismas del esmalte.

Y además, ¿sabés qué? El esmalte es el material más duro que hay en el cuerpo. La estructura y la manera en que están organizados los prismas juega un papel muy importante al determinar la resistencia del esmalte a romperse. La forma de cerradura de los prismas, por ejemplo, les permite estar muy pegados entre sí sin dejar espacios. Este diseño ayuda a evitar que el esmalte se rompa y hace que la superficie de los dientes sea lisa.

Cómo proteger el esmalte dental

Por más que el esmalte sea la sustancia más dura del cuerpo, tampoco es inquebrantable. El esmalte se puede desgastar, por lo que es de suma importancia protegerlo.

Cuando nos rompemos un hueso, el cuerpo puede crear tejido óseo nuevo para sanar la fractura y reparar el hueso. La piel también puede crear células nuevas para sanar una herida. En ambos casos, esto es posible porque los materiales que constituyen los huesos y la piel están vivos. Sin embargo, el esmalte y los prismas del esmalte no están hechos de tejido vivo. Por ello, no hay manera de que el esmalte se repare a sí mismo cuando se desgasta, se erosiona o se astilla.

Eso quiere decir que proteger el esmalte es esencial. Y eso, a su vez, quiere decir que es importante mantener buenos cuidados bucales cepillándose los dientes dos veces al día y limpiando diariamente los espacios entre los dientes. El uso de una pasta dental con flúor también puede ayudar a reducir el riesgo de desgaste del esmalte y caries, ya que ayuda a fortalecer este tejido. Otra forma de proteger el esmalte es evitando cualquier cosa que cause desgaste, como ciertos hábitos (rechinar los dientes o masticar cubos de hielo, por ejemplo) y el consumo de alimentos ácidos.

Si pensás que tu dieta o tus hábitos podrían estar dañando tu esmalte, hablá con tu dentista. Él o ella podrá decirte si debés evitar o reducir el consumo de ciertos alimentos. Además, te podrá ayudar con un protector bucal para evitar que el esmalte se dañe si tendés a rechinar los dientes.

Ya sabés qué son los prismas del esmalte y cuál es su función. Y no solo eso: también viste de cerca la estructura de los prismas del esmalte. Increíble, ¿no? No solo tienen un diseño espectacular, sino que también protegen los dientes y mantienen saludable el esmalte. Dicho esto, el esmalte sigue siendo susceptible al desgaste, así que no dejés de protegerlo siempre. Esto incluye cuidados diarios, una pasta dental con flúor y evitar hábitos o alimentos que puedan dañarlo. Si creés que necesitás ayuda para mantener el esmalte saludable, visitá a tu dentista o higienista dental cuanto antes. Podrán ayudarte a mantener una sonrisa fuerte y saludable.

La finalidad de este artículo es fomentar la comprensión y el conocimiento de temas generales de salud oral. Su propósito no es sustituir la opinión, el diagnóstico o el tratamiento profesionales. Solicita siempre la opinión experta de tu dentista u otro proveedor de salud calificado y consúltales cualquier pregunta que tengas en relación con alguna enfermedad o tratamiento médico.