Si te mirás al espejo y ves tu lengua con una apariencia mucho más roja que su tono rosado normal, es posible que padezcas un trastorno sanguíneo conocido como anemia perniciosa. Según el Centro de salud Fleni, este trastorno afecta a la capacidad del organismo de producir suficientes glóbulos rojos saludables debido a la carencia de una determinada proteína denominada factor intrínseco.
El cuerpo necesita esta proteína para absorber la vitamina B12, un nutriente imprescindible para el funcionamiento adecuado del sistema nervioso y la producción de glóbulos rojos. Una carencia de la proteína de factor intrínseco se traduce en una menor absorción de la vitamina B12 y la inhibición de la producción de glóbulos rojos.
Causas y factores de riesgo
Según la Sociedad de Medicina Interna de Buenos Aires, ciertos trastornos autoinmunes pueden ser un factor de riesgo para la anemia perniciosa, como la diabetes tipo 1. Este trastorno es más común entre adultos de más edad, pero también puede afectar a los niños, especialmente en el extraño caso de que un menor herede un trastorno que impida a su organismo producir factor intrínseco. También hay otras afecciones y factores que pueden causar una deficiencia de vitamina B12, como infecciones, cirugía, medicamentos y dieta.
Esta enfermedad es crónica y progresa lentamente, como apunta la Sociedad Argentina de Hematología (SAH). Una terapia de sustitución por cantidades adecuadas de vitamina B12 a menudo permite corregir la deficiencia. Sin embargo, los afectados por este trastorno sanguíneo también tienen un mayor riesgo de desarrollar cáncer de estómago. Por lo tanto, conviene someterse periódicamente a atención médica y odontológica para obtener el diagnóstico adecuado de cualquier cambio en la salud general y oral.
Síntomas de la lengua con anemia perniciosa
Según la SAH, la anemia perniciosa hace que la superficie de la lengua aparezca lisa y de color rojo en lugar del rosa de una lengua normal. La lengua también puede tener una textura especialmente robusta o corpulenta. Algunas lenguas incluso pueden presentar hinchazón o grietas, como señalan fuentes médicas. Además, los pacientes con este trastorno sanguíneo pueden sufrir úlceras bucales.
Otros síntomas de la anemia perniciosa
La SAH menciona los siguientes síntomas de este trastorno:
- Sensación de entumecimiento u hormigueo en manos y pies
- Debilidad muscular
- Náuseas
- Disminución del apetito
- Pérdida de peso
- Fatiga
- Frecuencia cardíaca elevada
Como estos síntomas pueden solaparse con los de otros trastornos sanguíneos o problemas de salud, es importante que un médico realice el diagnóstico. Por lo general, se podrá comprobar la deficiencia por medio de un análisis de sangre.
Opciones de tratamiento
El tratamiento de la anemia perniciosa requiere la ayuda de un médico. Según las mismas fuentes, los pacientes pueden necesitar un tratamiento de por vida, pero la administración de inyecciones o píldoras de vitamina B12 suele resultar muy eficaz.
Una dieta equilibrada que asegure el aporte suficiente de alimentos ricos en vitamina B12 y ácido fólico también es esencial para tratar la afección, destaca la SAH. Estas son algunas de las mejores fuentes de ambos componentes:
- Carnes rojas
- Carnes blancas
- Mariscos
- Huevos
- Leche
El uso continuado de suplementos de vitamina B12 y la ingesta de una dieta equilibrada te permitirán vivir tranquilamente con anemia perniciosa. Para mantener tu boca sana cuando tengas brotes de los síntomas, cepillate dos veces al día con una crema dental con flúor y usá hilo dental a diario. Es importante acudir a las revisiones periódicas tanto con tu médico como con tu odontólogo para abordar cualquier circunstancia que pueda surgir y ponerte en marcha hacia un tratamiento que redunde en una mejora general de la salud.