Si usted descubre que tiene un problema bucal como las encías retraídas, ¡es normal que sienta conmoción! Después de todo, se cepilla los dientes con regularidad y no ha notado ningún dolor grave en su vida diaria. Aun así, se trata de un padecimiento común que se puede presentar por varios factores, muchos de los cuales están fuera de su control. Debido a que las encías no pueden volver a crecer por sí mismas, el único remedio es hacer una cirugía de injerto de encía. El miedo al dolor por el injerto, sin embargo, puede hacer que usted quiera evitar el tratamiento a toda costa. Es comprensible. Sin embargo, si su dentista le recomienda un injerto de encía, es importante que entienda que eso no tiene por qué ser el resultado de un problema con los cuidados ni con la salud de su boca. Lo más importante es que se familiarice con la cirugía y que planifique con su dentista para mitigar el dolor durante y después del procedimiento. ¡Eso le dará más seguridad y confianza!
Dolor por injerto de encía: Qué esperar y cómo aliviarlo
¿Qué es el injerto de encía?
El injerto de encía es un procedimiento quirúrgico en el que se extrae tejido de la encía de una parte de la boca y se coloca en otra. Está diseñado para cubrir las raíces de los dientes que han quedado expuestas por la retracción gingival, en la que el tejido de la encía empieza a retraerse, o encogerse y alejarse de las raíces. También puede realizarse antes de un implante dental como parte de un procedimiento para crear suficiente sostén para el nuevo diente.
¿Por qué es importante el injerto de encía?
La causa más frecuente de la retracción de encías es la enfermedad periodontal. A medida que las encías se alejan de los dientes, se forman huecos bajo la línea de las encías que atrapan alimentos y bacterias. Con el tiempo, esto puede provocar la pérdida de hueso y dientes, por lo que puede ser necesario corregir el problema con un injerto de encía si no hay otras opciones no quirúrgicas adecuadas.
Los injertos de encía también son importantes para proteger las raíces de los dientes. A diferencia de las coronas de los dientes (las partes que suelen ser visibles), las raíces no están cubiertas de esmalte dental duro. En cambio, están cubiertas de un material más débil llamado cemento.
Normalmente, eso no es un problema porque el cemento se asienta debajo del tejido gingival. Sin embargo, si las encías se retraen, ese cemento queda expuesto a la placa y a los ácidos de los alimentos. Dado que el cemento no es tan duro como el esmalte, la caries dental puede afianzarse más velozmente y las caries pueden desarrollarse con rapidez. También puede padecer una sensibilidad intensa.
El cemento radicular es más oscuro que el esmalte, por lo que algunas personas presentan un marcado contraste de color entre la corona y la raíz expuesta. La retracción de las encías también puede hacer que los dientes parezcan mucho más largos. Por estas razones, algunas personas pueden desear someterse a injertos de encía también por motivos estéticos.
Factores de riesgo de la retracción de las encías
Una higiene bucal inadecuada, los cambios hormonales, la diabetes y otras enfermedades pueden aumentar su riesgo de padecer enfermedad periodontal, causándole retracción de las encías. Aunque muchas personas que padecen de encías retraídas las presentan por tener la enfermedad periodontal, el problema también se puede presentar por antecedentes familiares y genéticos. ¿Sabía usted, por ejemplo, que algunas personas tienen un tejido gingival más débil que otras por naturaleza?
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de los EUA (CDC) mencionan otro factor de riesgo: el tabaco. Sostienen que los fumadores tienen más del doble de probabilidades de padecer una enfermedad periodontal que quienes no fuman.¡Eso convierte a la retracción de las encías en un motivo más para abandonar el hábito!
Otros factores que propician la retracción de encías incluyen una técnica inapropiada o agresiva de cepillado dental, aplicar demasiada fuerza sobre los dientes por rechinarlos o por apretar la boca, o bien por la presión inusual que se presenta al tener los dientes desalineados. Además, tenga en cuenta que las perforaciones en la lengua y en el labio pueden rozar e irritar las encías, haciendo que el tejido se desgaste.
Tipos de injertos gingivales
Según el caso, su dentista o periodoncista podrá realizar uno de los siguientes tres injertos:
Injerto de tejido conectivo. Este es el tipo de injerto más frecuente, y suele hacerse cuando se presentan múltiples zonas con retracción. El tratamiento consiste en tomar tejido conectivo subyacente de un colgajo hecho en el paladar para suturarlo sobre las raíces expuestas.
Injerto de encía libre. Supongamos que usted tiene un tejido gingival débil que necesita ser reforzado. En ese caso, su dentista podría tomar una pequeña pieza de tejido del paladar y adherirlo al tejido gingival ya existente en torno al diente. Para evitar que usted tenga dos sitios quirúrgicos o si hace falta una mayor cantidad de tejido, su dentista también podría usar tejido humano liofilizado.
Injerto pedicular. Este procedimiento se realiza usando el tejido gingival que se encuentra al lado de las raíces expuestas. Por eso, únicamente es posible si el tejido está sano y es grueso. Durante la intervención, su dentista cortará un pequeño colgajo de tejido sano, lo girará y a continuación lo suturará sobre la raíz afectada.
Según el caso, puede que usted requiera de una alternativa al injerto de encía o de un tipo de injerto adicional. Estos incluyen la regeneración raspado y alisado radicular y remodelación gingival.
¿Es doloroso el injerto de encía?
Independientemente de si usted necesita un injerto para un solo diente o para varios, su dentista le evitará el dolor durante el procedimiento adormeciendo los sitios quirúrgicos con anestesia local.. Una vez concluida la cirugía, colocará un apósito sobre el lugar del injerto para protegerlo durante el periodo de cicatrización.
Sin embargo, una vez en casa, cuando la anestesia deje de surtir efecto, sentirá algunas molestias y tendrá inflamación durante algunos días. Sin embargo, no tiene por qué preocuparse: su dentista le recetará analgésicos para el dolor y posiblemente también un antibiótico para evitar infecciones. Si observa que el dolor es intenso y no responde a los analgésicos, póngase en contacto con su dentista o periodoncista para recibir más ayuda.
Control del dolor después de un injerto de encía
Para reducir el dolor de la cirugía de injerto de encía al mínimo y evitar complicaciones innecesarias, le recomendamos seguir las instrucciones posquirúrgicas indicadas por su dentista o periodoncista. Entre ellas podrían figurar las siguientes:
- En caso de sangrado, coloque una gasa de cada lado del lugar de la cirugía, pero no encima.
- Evite realizar actividades físicas durante las primeras 24 horas después de la operación.
- No se jale los labios para ver la herida.
- Mantenga la lengua alejada de la zona quirúrgica.
- No retire el apósito.
- No se cepille ni se enjuague la boca el día de la cirugía.
- Pasadas las primeras 24 horas después de la cirugía, use un enjuague bucal para eliminar las bacterias.
Cuando vuelva a cepillarse los dientes, no se cepille los que se encuentran cerca del lugar del injerto durante un mes. Después de este período, use un cepillo de cerdas muy suaves y haga movimientos muy cuidadosos.
Qué comer después de un injerto de encía
Para ayudar a que sus encías cicatricen tras un injerto de encía, es importante que tenga una alimentación nutritiva. Sin embargo, tenga en cuenta lo siguiente para no irritar sus delicadas encías:
- Consuma líquidos y alimentos blandos como sopas, puré de papas o yogur.
- Llénese sobre todo de frutas blandas y verduras.
- Evite el alcohol y los alimentos picantes, salados o ácidos.
- Evite los alimentos con texturas duras, crocantes o pegajosas.
- Evite los alimentos y bebidas muy calientes o muy fríos.
Recuperación y cicatrización del injerto de encía
Otro dato que le dará calma es que el proceso de recuperación después de un injerto de encía suele ser corto. Lo normal es sentir molestias en el sitio quirúrgico durante aproximadamente un día. Lo más probable es que se sienta lo suficientemente bien como para regresar a sus actividades normales algunos días después de la cirugía.Para evitar irritar o causar inflamación en la zona en proceso de cicatrización y al mismo tiempo mantener limpia la boca, su dentista o periodoncista le podría recomendar un enjuague bucal especial. Este ayudará a eliminar las bacterias mientras espera a poder volver a cepillarse los dientes y usar hilo dental (limpieza interdental) como siempre.
¿Cuándo es demasiado tarde para el injerto de encía?
Si tiene una pérdida ósea o gingival significativa, es posible que no sea un candidato adecuado para el injerto de encía. Puede resultar difícil cubrir adecuadamente las raíces expuestas y el riesgo de fracaso será mayor. También tendrá un mayor riesgo de complicaciones como dolor, infección y retraso en la cicatrización.
Si cree que podría beneficiarse de un injerto de encía, acuda al dentista cuanto antes. Cuanto menos avanzada esté la retracción de las encías, más posibilidades tendrá de obtener un resultado satisfactorio.
Lo más probable es que la primera persona en notar que sus encías están retraídas en algún lugar sea su dentista durante un examen de rutina. Una razón más para ser diligente a la hora de programar sus citas periódicas de revisión y limpieza. Si usted rechina los dientes en la noche, pídale un protector bucal a su dentista para ayudar a dejar el hábito y hable acerca de sus opciones para enderezar sus dientes si los tiene desalineados. Al final, mantenerse alerta a los primeros síntomas de la enfermedad de las encías lo ayudará a detener la infección antes de que requiera de atención profesional. Estos síntomas incluyen encías inflamadas que sangran con facilidad y mal aliento constante.
Evitar la retracción de las encías es mucho más fácil y barato que tratar el problema. Así que: si su rutina de cuidados en casa está incompleta o si se saltó su última consulta dental, ¡es hora de ponerse al día! Además, no olvide llamar a su dentista en cuanto observe alguna señal de problemas periodontales. Si le diagnostican retracción de encías y tiene miedo al dolor por el injerto de encía, no se preocupe. Hable con su dentista sobre cómo reducirá el dolor durante y después de la cirugía. Tener un plan lo ayudará a que este procedimiento se desarrolle sin problemas para que pueda empezar a sentir confianza en su sonrisa.
La finalidad de este artículo es fomentar la comprensión y el conocimiento de temas generales de salud oral. Su propósito no es sustituir la opinión, el diagnóstico o el tratamiento profesionales. Solicita siempre la opinión experta de tu dentista u otro proveedor de salud Calificado y Dile siempre cualquier pregunta que tengas en relación con alguna enfermedad o tratamiento médico.