Si tiene una boca sana, probablemente no esté acostumbrado a pensar en sus encías. Se adhieren perfectamente a sus dientes y no le causan dolor ni ningún otro problema. Pero cuando la distancia entre el tejido de las encías y los dientes empieza a aumentar en profundidad, comienzan a formarse unos espacios llamados bolsas periodontales. Esto es un signo de enfermedad de las encías, una afección que puede provocar la pérdida de dientes si no se trata. Pero con un diagnóstico y tratamiento tempranos, ¡puede conservar los dientes toda la vida! Repasemos cómo se forman las bolsas periodontales, cómo se diagnostican, sus opciones de tratamiento y las medidas preventivas que puede tomar en casa.
¿Qué es una bolsa periodontal?
Una bolsa periodontal es un hueco que se forma entre las encías y la superficie de la raíz de los dientes.
En una boca sana, el tejido gingival (encía) recubre el hueso, los ligamentos y otros tejidos conectivos que mantienen los dientes en su lugar. El margen gingival (el borde de la encía) forma un sello hermético alrededor del diente y está bien adherido a la raíz del diente que está debajo. Una bolsa periodontal se produce cuando el tejido de la encía empieza a separarse de la superficie de la raíz del diente, creando un espacio entre la encía y el diente. Exploremos por qué ocurre eso...