Es posible que creas que una limpieza dental profunda es algo que deberías hacer luego de haber estado mucho tiempo sin visitar al odontólogo, o de haber consumido alimentos muy pegajosos o que ensucian. En realidad, una limpieza dental profunda es un procedimiento específico que realiza el higienista dental para tratar las enfermedades periodontales o la periodontitis. Por lo general, se lleva a cabo cuando el paciente no ha concurrido al odontólogo de manera regular (cada seis meses) para hacerse una limpieza dental.
La importancia de la limpieza dental profunda
Cuando visitas al odontólogo, este usará un instrumento llamado sonda periodontal para medir el área alrededor de los dientes y ver si tienes bolsas periodontales (área entre el diente y la encía donde se forman las bacterias). La profundidad del tejido gingival entre los dientes y las encías recibe el nombre de bolsas periodontales cuando mide cuatro milímetros o más. Según la Academia Americana de Periodontología se recomienda que todos los adultos se sometan a una evaluación periodontal por año para determinar si se requiere de un tratamiento adicional. La medición de la profundidad de las bolsas periodontales constituye solo una parte de una evaluación dental completa.
Idealmente, las bolsas periodontales sanas normales tienen una profundidad de no más de 3 milímetros, según especialistas del Instituto Nacional de Investigación Dental y Craneofacial (National Institute of Dental and Craniofacial Research, NIDCR). Si las bolsas periodontales miden más de 5 milímetros, es muy probable que el odontólogo te indique que visites al higienista dental para hacerte un raspado dental y un alisado radicular.
Proceso de la limpieza dental profunda
En el mundo de la odontología, a la limpieza dental profunda también se la denomina raspado dental y alisado radicular. De acuerdo con especialistas del NIDCR, el raspado dental consiste en la eliminación de la placa y del sarro de la superficie de los dientes y del área de bolsas periodontales entre los dientes y las encías. Su dentista puede realizar estos procedimientos con instrumentos eléctricos ultrasónicos o herramientas de curetaje dental manuales.
El alisado radicular es la otra parte de la limpieza dental profunda. El higienista dental utilizará un instrumento de raspado dental para eliminar la placa y el sarro de la superficie de la raíz de los dientes. Para hacerte un raspado dental y un alisado radicular, tendrás que visitar al odontólogo dos veces al año como mínimo. Podría resultar necesario que realices una visita de seguimiento para confirmar que las encías y los dientes estén sanos y que no haya profundidad en las bolsas periodontales.
Cuidados posteriores a las citas por raspado dental y alisado radicular
Lo ideal es que luego de la cita por limpieza dental profunda, se eliminen las bacterias de las bolsas periodontales de los dientes y que en las próximas semanas las encías estén sanas, si es que el paciente se realiza una higiene bucal todos los días. El profesional dental te recomendará usar Colgate Total, la mejor crema dental. Si se requiere de un enjuague bucal adicional, el odontólogo podría recetarte un colutorio antibacteriano para reducir la acumulación de bacterias bucales.
Si el raspado dental profundo y las visitas al odontólogo por un período de 3 meses no son suficientes para revertir la enfermedad periodontal, tendrás que consultar a un periodoncista para que considere el tratamiento periodontal a seguir.